SAN MARTÍN Y BOLÍVAR, PERSPECTIVAS DISTINTAS DE GOBIERNO PARA CON AMÉRICA
SAN MARTÍN Y BOLÍVAR, PERSPECTIVAS DISTINTAS DE GOBIERNO
PARA CON AMÉRICA
El 2 de junio de 1821, el general
San Martín se reunió con el Virrey de Perú, José de la Serna, en plena guerra y
poco antes de la caída de Lima. San Martín sabía que se iba a consolidar una
independencia sin contenido, que un grupo de militares, abogados y propietarios
asumirían en nombre de la democracia el gobierno de repúblicas vacías cuyas
gentes no estaba preparadas para gobernar; por lo que la solución más viable
para él, era la de tener una República Monárquica.
El general argentino propuso en
la Conferencia, el reconocimiento indiscutible de la independencia de Perú por
parte de España como base para el cese de las hostilidades entre los ejércitos
independentista y realistas. Igualmente fue de la idea que un príncipe español fuera
el encargado de dirigir los destinos del Perú como Monarca Constitucional, a
semejanza de Gran Bretaña.
Sugirió que podría viajar con el
Virrey para presentar el tema ante la Corte de España con tal fin y les
pondrían al tanto del cese del sistema colonial. Contrario a lo que se
imaginaba, La Serna y sus generales liberales celebraron con gran algarabía el
plan, y quedaron en que sugerirían algunos nombres que, unidos a los propuestos
por San Martín, formarían un Consejo de Regencia hasta la llegada de dicho
príncipe.
Mas este anhelo del libertador
argentino que contaba con el beneplácito de los españoles en Sudamérica, no
contó con el aval de los españoles peninsulares, pues los burócratas de España aún
creían que el imperio de Felipe II podría reconstruirse y cesar con el sueño
independentista de sus colonias americanas.
San Martín comprendió que
necesitaba doblegar al enorme ejército realista acantonado en Perú para
consolidar su idea, y llevó su propuesta ante Bolívar en Guayaquil, siendo
recibido el 22 de julio de 1822. Desafortunadamente, Bolívar ya pensaba en una “democracia
vitalicia”, con él como regente. El venezolano manifestó que no admitiría a
príncipes de las casas de los Borbones, Austrias ni ninguna otra dinastía europea
diferente a la que no fuera suya.
En cuanto a España, Bolívar afirmaba
que no bastaba romper con España, sino que "era indispensable también
romper con todas sus tradiciones de gobierno y administración, y entre ellas
con la tradición monárquica".
Terminada la reunión, San Martín
se embarcó en el buque Macedonia, hacia Perú, para renunciar a todos sus cargos
y emprender después el largo exilio, mientras la anarquía dominaría el
continente por varios lustros.
Referencia:
Lanacion.com.ar. San Martín y
Bolívar: dos ideas distintas para América.
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