EL HOMBRE MODERNO… ¿SE ORIGINÓ EN ÁFRICA O TIENE UN ORIGEN MULTIRREGIONAL?. PERCY ZAPATA MENDO.
EL
HOMBRE MODERNO… ¿SE ORIGINÓ EN ÁFRICA O TIENE UN ORIGEN MULTIRREGIONAL?
Un
nuevo estudio con fósiles asegura que el ser humano se originó en diferentes
regiones del mundo a la vez, contradiciendo, así, la teoría que afirma que
desciende de un único grupo que vivió en el África.
Luego
de una tórrida temporada boreal, algunos de nuestros ancestros decidieron que el
África no era el mejor lugar para vivir. Y se lanzaron, nomás, en busca de
nuevos horizontes. Esto ocurría hace un millón y medio de años, cuando algunos
antepasados de la humanidad (que hasta entonces sólo habitaban en el continente
africano) se animaron a descubrir nuevas geografías.
Todos
los científicos coinciden en este primer capítulo de la prehistoria del ser
humano. Pero la polémica estalla a la hora de explicar el segundo acto: el
surgimiento del hombre moderno (el homo sapiens), hace "apenas" unos
100 mil años atrás.
En
esto las aguas están divididas. Hasta ahora, la mayoría de los antropólogos
creía que el hombre moderno proviene exclusivamente de un grupo pequeño de
antepasados que permanecieron en el África. Según esta teoría, el homo sapiens
habría surgido de este único centro evolutivo humano. Y luego se habría
trasladado a los distintos continentes.
A
esta hipótesis se la conoce como "Teoría de Eva" (o teoría del
reemplazo). Según ella, todos los otros grupos pre humanos se extinguieron, en
algo así como un verdadero holocausto genético. Algunos, incluso, la llaman la
"teoría de los africanos asesinos". Le atribuyen a ese grupo la
responsabilidad de haber desplazado a todo posible ancestro humano que hubiera
en otros lugares.
A
la Teoría de Eva se le opone, y cada vez con más fuerza, la teoría de la
Evolución Multirregional (MRE, por multi-regional evolution). Según esta otra
hipótesis, el hombre moderno se habría desarrollado simultáneamente en
distintas regiones del mundo. Para los científicos que la respaldan, en esos
diferentes centros evolutivos se habrían originado distintas poblaciones de
homo sapiens con características diferentes a las de los africanos.
Deduciendo el problema
El
Modelo de la Continuidad Multirregional contiende que después de que Homo
erectus salió de África y se dispersó a otras porciones del Viejo Mundo, las
poblaciones regionales evolucionaron lentamente en los humanos modernos. Este
modelo tiene los siguientes componentes:
·
Algún nivel de
flujo genético entre las poblaciones separadas geográficamente previno la
especiación después de la dispersión;
·
Todos los humanos
que viven hoy en día se derivaron de la especie Homo erectus que salió de
África hace casi dos millones de años;
·
La selección
natural, actuando sobre las poblaciones regionales desde su dispersión
original, es responsable de las variantes regionales (a veces llamadas razas)
que vemos hoy en día;
·
La aparición de
Homo sapiens no se restringió a un área solamente, sino que fue un fenómeno que
ocurrió a través del rango geográfico completo donde vivían los humanos.
En
contraste, el Modelo Fuera de África afirma que los humanos modernos
evolucionaron relativamente recientemente en África, migraron a Eurasia y
reemplazaron a todas las poblaciones que habían descendido de Homo erectus. Los
siguientes principios son críticos en este modelo:
·
Después de que
Homo erectus migró fuera de África, las diferentes poblaciones se aislaron
reproductivamente, evolucionando independientemente y, en algunos casos como en
los Neandertales, en especies separadas; Homo sapiens se originó en un solo
sitio, probablemente en África (geográficamente esto incluye el Medio Este);
·
Homo sapiens
migró ultimadamente fuera de África y reemplazó a todas las otras poblaciones
humanas, sin entrecruzarse con ellas;
·
La variación en
los humanos modernos es un fenómeno relativamente reciente.
La
perspectiva multiregional postula que los genes de todas las poblaciones
humanas del Viejo Mundo fluyeron entre regiones diferentes y se mezclaron,
contribuyendo a lo que observamos actualmente en los humanos modernos. La
hipótesis del reemplazo sugiere que los todos genes de los humanos
completamente modernos vinieron de África. A medida que estas gentes migraron,
ellas reemplazaron a todas las otras poblaciones humanas, con muy poco o ningún
entrecruzamiento.
Para
entender la controversia, necesitamos evaluar la evidencia anatómica,
arqueológica y genética.
La evidencia anatómica
En
una época antes de hace un millón de años, los primeros homínidos, a veces
llamados Homo ergaster, salieron de África y se dispersaron a otras partes del
Viejo Mundo. Al vivir en áreas geográficas dispares, su morfología se
diversificó a través de los procesos de la deriva genética y de la selección
natural.
·
En Asia estos
homínidos evolucionaron en el Hombre de Pekín y en el Hombre de Java, referidos
en conjunto como Homo erectus;
·
En Europa y en
Asia occidental ellos evolucionaron en los Neandertales.
Los
Neandertales vivieron en un aislamiento casi total en Europa durante un período
relativamente frío, el cual hasta incluyó glaciaciones. Los Neandertales se
distinguen por un juego de características anatómicas únicas, incluyendo:
·
Una cavidad
craneal grande, larga y baja, con una protuberancia frontal bien desarrollada y
doblemente arqueada;
·
Un esqueleto
facial masivo con una cara media bien proyectada, mejillas echadas hacia atrás
y apertura nasal grande, con senos nasales también grandes;
·
Una extraña
región occipital del cráneo con una saliente o “chichón;”
·
Molares con
cámaras de pulpa agrandadas y con dientes incisivos grandes y a menudo
altamente gastados;
·
Una mandíbula sin
barbilla y con una gran apertura detrás del último molar;
·
Un tórax masivo,
con los brazos anteriores y las pantorrillas relativamente cortas;
·
A pesar de ser
bajos de estatura, poseían esqueletos muy robustos, con huesos de pared muy
gruesa;
·
Clavículas largas
y escápulas muy anchas.
Para
hace 130,000 años atrás, y seguido de un periodo prolongado de evolución
independiente en Europa, los Neandertales eran anatómicamente tan únicos que es
mejor clasificarlos como una especie diferente: Homo neanderthalensis. Éste es
un ejemplo clásico de aislamiento geográfico que llevó ultimadamente a un
evento de especiación.
En
contraste, aproximadamente al mismo tiempo en África, un plan corporal
esencialmente como el nuestro había aparecido. A pesar de que estos primeros
Homo sapiens eran anatómicamente modernos, ellos no eran modernos en su
comportamiento. Es muy importante anotar que la anatomía moderna evolucionó
antes del comportamiento moderno; estos primeros sapiens estaban caracterizados
por lo siguiente:
·
Una cavidad
craneal con una frente vertical, un occipital redondeado y una protuberancia de
la frente reducida;
·
Un esqueleto
facial reducido sin una cara media proyectada hacia adelante;
·
Una mandíbula
inferior con barbilla;
·
Un esqueleto
moderno y menos robusto.
De
allí, la evidencia anatómica y paleo geográfica sugiere que los Neandertales y
los humanos modernos estuvieron aislados los unos de los otros y que ellos
evolucionaron separadamente en dos especies diferentes.
La evidencia arqueológica
De
manera muy interesante, mientras que los Neandertales y los primeros Homo
sapiens se distinguían los unos de los otros por un juego de características
anatómicas obvias, arqueológicamente eran muy similares. Los homínidos
africanos de la Edad de Piedra Media (H. sapiens) y sus contemporáneos
Neandertales europeos del Paleolítico Medio poseían juegos de artefactos
caracterizados de la siguiente manera:
·
Poca variación en
tipos de herramientas líticas, con una preponderancia de herramientas de
esquirlas de piedra que son difíciles de separar en categorías discretas;
·
Los juegos de
herramientas fueron muy similares a lo largo de grandes extensiones de tiempo y
de distancia;
·
Una virtual falta
de herramientas hechas de hueso, asta o marfil;
·
Los entierros no
tenían bienes funerarios o evidencia de ceremonias o rituales;
·
La cacería estaba
generalmente limitada a especies menos peligrosas y no hay evidencia de pesca;
·
Las densidades
poblacionales eran aparentemente bajas;
·
Tampoco hay
evidencia de estructuras de vivienda y las fogatas eran rudimentarias;
·
Tampoco hay
evidencia de arte o decoración.
El
cuadro arqueológico cambió dramáticamente cerca de los 40 a 50,000 años atrás,
con la aparición de los humanos de comportamiento moderno. Esto representó un
cambio abrupto y dramático en los patrones de subsistencia, en las herramientas
y en la expresión simbólica. El tremendo cambio en la adaptación cultural no
fue solamente un cambio cuantitativo, sino uno que representó una separación
significativa del comportamiento humano anterior, reflejando una gran transformación
cualitativa. Fue literalmente una “explosión creativa” la cual exhibió la
“ingenuidad tecnológica, las formaciones sociales y la complejidad ideológica
de los cazadores-recolectores históricos.” Esta revolución humana fue
precisamente la que nos hizo lo que somos hoy.
La
aparición del comportamiento humano moderno completo aparentemente ocurrió en
África antes de ocurrir en otras partes del Viejo Mundo, pero se dispersó
rápidamente debido a los movimientos de las poblaciones a otras regiones geográficas.
El estilo de vida del Paleolítico Superior, como fue llamado, era esencialmente
el de cazar y recolectar. Esta adaptación cultural fue tan exitosa que hasta
hacen aproximadamente unos 11,000 años, los homínidos en todo el mundo
subsistían esencialmente como cazadores-recolectores.
En
el Paleolítico Superior de Eurasia, o en la Edad de Piedra Tardía como se le
conoce en África, la evidencia arqueológica se distingue fuertemente al ser
contrastada con aquella del Paleolítico Medio o Edad de Piedra Media. Estuvo
caracterizada por innovaciones significativas:
·
Una diversidad
asombrosa en los tipos de herramientas de piedra;
·
Los tipos de
herramientas cambiaron significativamente en el espacio y en el tiempo;
·
Los artefactos
fueron manufacturados en hueso, asta y marfil además de la piedra;
·
Los artefactos de
piedra fueron manufacturados principalmente en hojas y se pudieron;
·
Clasificar
fácilmente en categorías discretas, presumiblemente reflejando usos
especializados;
·
Los entierros
fueron acompañados de ceremonias rituales y contenían una rica diversidad de
bienes funerarios;
·
Las viviendas y
fogatas fueron bien diseñadas y construidas;
·
La cacería de
animales peligrosos y la pesca ocurrió con regularidad;
·
La densidad de
las poblaciones fue mayor;
·
El arte fue
abundante y elaborado, así como también el uso generalizado de adornos
personales;
·
Las materias
primas, como esquirlas de piedra y conchas, fueron comercializadas sobre
grandes distancias.
Los
Homo sapiens del Paleolítico Superior o Edad de Piedra Tardía fueron
primordialmente modernos en apariencia y en comportamiento. Aún no se explica
con precisión como ocurrió esta transformación, pero aparentemente se
restringió a los Homo sapiens y no ocurrió en los Neandertales. Algunos
arqueólogos han invocado una explicación comportamental para explicar el
cambio. Por ejemplo, Soffer sugiere que cambios en las relaciones sociales,
tales como el desarrollo de la familia nuclear, jugaron un papel clave en la
ocurrencia de la transformación.
Por
su parte, Klein ofrece la noción de que probablemente un cambio biológico
causado por mutaciones jugó el papel clave en la emergencia de los humanos de
comportamiento moderno. Su explicación basada en la biología implica que
ocurrió una reorganización neural mayor en el cerebro, trayendo consigo una
mejora significativa en la manera en que el cerebro procesaba la información.
Esta hipótesis es muy difícil de corroborar ya que los cerebros no se
fosilizan. Sin embargo, es significativo que no se observan cambios en la forma
de los cráneos entre los Homo sapiens tempranos y los tardíos. El registro
arqueológico, con su abundante evidencia de artes y rituales, sólo nos permite
concluir que estas gentes del Paleolítico Superior o Edad de Piedra Tardía
poseían habilidades lingüísticas equivalentes a las nuestras. Para muchos
antropólogos esto representa un salto evolucionario final al modernismo
completo.
Poco
después de la entrada a Europa de los humanos completamente modernos, los
Neandertales comenzaron a declinar rápidamente, hasta culminar en su
desaparición aproximadamente hace 30,000 años. Aparentemente, los Neandertales
no pudieron sobrevivir a los tecnológicamente avanzados humanos modernos que
invadieron a Europa. La evidencia del entrecruzamiento entre estos dos tipos es
dudosa.
Evidencia genética
La
investigación sobre los patrones de variación genética en las poblaciones
humanas modernas apoya la perspectiva de que el origen del Homo sapiens es el
resultado de un evento reciente, consistente con el Modelo Fuera de África.
·
Los estudios en
el ADN contemporáneo, especialmente del ADN mitocondrial (mtADN) el cual solo
ocurre en los organelos celulares llamados mitocondrias, revelan que los
humanos son sorprendentemente homogéneos, con una variación genética
relativamente pequeña.
·
El alto grado de
similaridad entre las poblaciones humanas se contrasta fuertemente con la
condición observada en los chimpancés, nuestros parientes vivientes más
cercanos. De hecho, existe una variación genética significativamente mayor
entre dos individuos de chimpancés tomados de la misma población que la que hay
entre dos humanos tomados al azar de una misma población. Más aún, la variación
genética entre las poblaciones de chimpancés es inmensamente mayor que las
diferencias entre las poblaciones humanas de Europa, Asia y África.
·
En apoyo al
origen africano para Homo sapiens, el trabajo de Cann y Wilson ha demostrado
que el nivel más alto de variación genética en el mtADN ocurre en poblaciones
africanas. Esto implica que el Homo sapiens apareció primero en África y desde
ese entonces tuvo un periodo de tiempo largo para acumular diversidad genética.
Más aún, usando la distancia genética entre las poblaciones de África y otras poblaciones
como una medida del tiempo, ellos sugieren que Homo sapiens surgió entre
100,000 y 400,000 años atrás.
·
La pequeña
cantidad de variación genética en las poblaciones humanas modernas sugiere que
nuestros orígenes pueden reflejar una población fundadora de Homo sapiens
relativamente pequeña. El análisis del mtADN hecho por Rogers y Harpending
apoya la perspectiva de que una población pequeña de Homo sapiens, de entre
10,00 a 50,000 individuos, salió de África durante el período aproximado de
50,000 a 100,000 años atrás.
Los
científicos han tenido éxito reciente en extraer el ADN de varios esqueletos de
Neandertales. Después de un cuidadoso análisis, particularmente del mtADN pero
también ahora de una cantidad de ADN nuclear, es aparente que el ADN de los
Neandertales es muy diferente al de nosotros. Al medir el grado de diferencia
entre el ADN de los Neandertales y el de los humanos modernos, los autores
sugieren que estos dos linajes han estado separados por más de 400,000 años.
A
pesar de estar aún en su infancia, este tipo de estudio genético apoya la
perspectiva de que los Neandertales no se entrecruzaron con los Homo sapiens
que migraron a Europa. Es entonces muy probable que los humanos modernos no
lleven en su ADN genes de los Neandertales.
Consideraciones adicionales
La
cronología en el Medio Este no apoya al Modelo de Multiregionalidad, donde los
Neandertales y los humanos anatómicamente modernos traslaparon por un largo
periodo de tiempo.
·
Algunas cavernas
en Israel, más notablemente las de Qafzed y Skhul, están fechadas a casi
100,000 atrás y contienen esqueletos de humanos anatómicamente modernos. Más
aún, se conocen restos de Neandertales provenientes de sitios como la caverna
de Tabun, de 110,000 años de edad, la cual precede por unos 10,000 años en la
región al Homo sapiens más temprano.
·
La presencia de
Neandertales en otras dos cuevas en Israel, Amud y Kebara, fechadas
aproximadamente a 55,000 años, significa que los Neandertales y los Homo
sapiens traslaparon en la región durante por lo menos 55,000 años. Si los Homo
sapiens estuvieron en esta región por unos 55,000 años antes de la desaparición
de los Neandertales, entonces no hay ninguna razón para asumir que los
Neandertales evolucionaron en los humanos modernos.
·
La evidencia
arqueológica de Europa sugiere que los Neandertales pueden haber sobrevivido en
la Península Ibérica hasta quizás tan recientemente como 30,000 a 35,000 años
atrás. Los humanos completamente modernos aparecieron por primera vez en Europa
entre 35,000 y los 40,000 años atrás, trayendo con ellos la tradición de
herramientas del Paleolítico Superior conocida como Aurignaciana. De allí, los
Neandertales y los humanos completamente modernos pueden haber traslapado en
Europa por un tiempo de hasta 10,000 años. De nuevo, con los humanos
completamente modernos en la escena, no es necesario tener a los Neandertales
evolucionando hacia los humanos modernos, lo cual le da más peso a la
perspectiva de que los humanos reemplazaron a los Neandertales.
·
Sin embargo, la
situación en el Sur de Francia no es tan clara. Aquí, en varios sitios fechados
a 40,000 años aproximadamente, existe evidencia de una industria arqueológica
conocida como Châtelperroniana, la cual contiene elementos de artefactos del
Paleolítico Medio y Alto. Los homínidos de estos sitios son claramente
Neandertales, encendiendo las especulaciones de que el Châtelperroniano es un
ejemplo de los Neandertales imitando a la cultura de los humanos modernos. La
falta de intermediarios anatómicos en estos sitios sugiere que si los
Neandertales encontraron y tomaron prestadas ciertas tecnologías de los Homo
sapiens, ellos no se hibridizaron.
·
Un híbrido
potencial Neandertal/sapiens de hace 24,500 años proveniente del sitio Lagar
Velho, en Portugal, fue anunciado. Este individuo de 4 años de edad tiene un
cuerpo corto y ancho como un Neandertal, pero posee un cráneo anatómicamente
moderno. Existe una serie de problemas en la interpretación de este hallazgo
como un híbrido Neandertal/sapiens. Primero que todo, como un híbrido, debería
tener una mezcla de caracteres en todo el cuerpo y no simplemente poseer el
cuerpo de un Neandertal y el cráneo de un humano moderno. Por ejemplo, si
observamos a los híbridos entre leones y tigres, ellos no poseen la cabeza de
una especie y el cuerpo de la otra, sino que exhiben una mezcla morfológica de
ambas especies. Segundo, y más importante, la aceptación de este espécimen como
un híbrido sugeriría que los caracteres de los Neandertales fueron retenidos
por entre 6,000 a 10,000 años después de que los Neandertales se extinguieron,
lo cual es muy poco probable. Esto es teóricamente improbable porque los
caracteres de los Neandertales habrían sido completamente diluidos por los
genes de Homo sapiens en un periodo de tiempo tan largo.
·
Wolpoff, citan
evidencia de continuidad regional proveniente de Asia. Ellos ven un enlace
evolucionario directo entre los antiguos Homo sapiens de Java hasta los
aborígenes de Australia. Un posible problema con esta interpretación es que los
cálculos de edad de los últimos sobrevivientes de Homo erectus en Indonesia
sugieren que ellos vivieron allí hasta hace 50,000 años, lo cual potencialmente
coincide con el tiempo de la llegada a la región de los humanos completamente
modernos provenientes de África.
·
La China contiene
la mejor evidencia en apoyo al Modelo Multiregional. Allí se han descubierto un
par de cráneos fechados a 100,000 años atrás que parecen poseer una mezcla de
caracteres del clásico Homo erectus y del Homo sapiens. Es necesario tener
mejores datos de fechas geológicas y especímenes más completos para poder
examinar en más detalle esta posibilidad.
Conclusión
Por
el momento, la mayoría de la evidencia anatómica, arqueológica y genética da
credibilidad a la perspectiva de que los humanos completamente modernos son un
fenómeno evolucionario relativamente reciente. La mejor explicación que tenemos
hoy en día para la génesis de los humanos modernos es el Modelo Fuera de
África, el cual postula un origen singular y africano para Homo sapiens. Las
innovaciones culturales y neurológicas mayores que caracterizaron a la
aparición de los humanos completamente modernos resultaron ser particularmente
exitosas, culminando en nuestra dominancia del planeta a costa de todas las
poblaciones de los homínidos anteriores.
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